Cuando tú me quieres, yo no te quiero.
Cuando yo te quiero, tú no me quieres a mí.
Y cuando no estamos juntos... los dos nos queremos y sufrimos por amor.
Así de absurdo es el amor.
No sabemos si somos compatibles y tú una vez más te has adelantado tres pueblos. ¿Cómo vas a saber hoy cómo nos vamos a sentir juntos dentro de seis meses o de un año? ¿Quién sabe si los miedos que tenemos los dos ahora, podremos superarlos juntos o seguirán ahí?
Siempre me has dicho que me pueden mis miedos. Ahora te pueden a ti. Espero sinceramente que los superes pronto porque hoy por hoy yo estoy loca por ti. No sé cómo ni porqué, pero te quiero.
Te quiero en mi vida. No quiero renunciar a ti y prefiero no perderte la pista por si cambias de opinión algún día... o por si cambio yo. Ya sea mañana, dentro de un mes, de un año, de dos, tres, cuatro o cinco años, cuando sea. Siento que tenemos algo pendiente todavía. Yo tampoco quiero perderte.
