miércoles, 27 de julio de 2011

25 de Julio de 2011

Es un día importante para mí, quizá el más importante de mi vida hasta el momento presente. Hoy se cumple uno de los objetivos que me había marcado para este año y estoy feliz. De verdad que soy muy feliz. Me llueven los enhorabuenas de toda la gente que me importa en este mundo, pero yo no puedo evitar pensar que no es para tanto y que no lo merezco. No quiero quitarme el mérito, que algo sí que tengo y me siento orgullosa, pero es que tanta felicitación no deja de recordarme que hace mucho que debería haber alcanzado este objetivo y así no habría faltado a mi palabra y él estaría orgulloso de mí. Y cuando respondo que sí, que muchas gracias y que esto muy  contenta, pero que ya era hora, todos me disculpan. "Es que desde que empezaste a trabajar..."; "Fueron unas circunstancias especiales"; "Lo hiciste muy bien, teniendo en cuenta la situación y todas tus circunstancias". Y yo me callo. No les doy la razón, pero tampoco digo nada. Porque en el fondo yo sé que no fueron las circunstancias ni el trabajo, ni nada aparte de mi inmensa capacidad para hacer el vago y dejar las cosas para el último momento. Y, seamos realistas, soy lista, pero ciencia infusa, desgraciadamente para mí, no tengo. Quizá eso cambie algún día, no lo sé. Aunque no siempre soy así, si algo me apasiona suelo entregarme en cuerpo y alma.

Bueno, la cuestión es que he cumplido el objetivo posible que tenía para este año. El imposible, el que no depende sólo de mí, pero que sigo esperando como una ilusa, mis ilusiones y mis sueños, sigue sin cumplirse. Y quizás se cumpla o se transforme en otro objetivo de la misma naturaleza, pero posible. Me quedan otros cinco meses para conseguirlo y quién sabe lo que se cruzará en ese tiempo en mi destino. Sólo sé que lo que predijo mi amiga la bruja se ha cumplido: según ha ido pasando el tiempo todo ha sido ascendente.

Hoy finaliza una etapa de mi vida muy larga, pero también muy buena y rica en vivencias. Dentro de poco empezará otra que espero que me haga realizarme como persona y de la que cada día estoy más convencida de que he hecho la elección correcta. Una etapa que espero que me lleve al objetivo final de mi vida. Un objetivo muy ambicioso y difícil, pero que me encantaría poder alcanzar algún día. Mientras tanto, yo seguiré escribiendo mi destino pasito a paso y con buena letra. Intentaré no perder nunca la esperanza y esperemos que todo siga siendo ascendente.


3 comentarios:

TORO SALVAJE dijo...

Muchas felicidades por haber alcanzado ese objetivo.
Tu forma de analizarte y valorarte es un camino excelente para conseguir lo que te propongas.

Saludos.

Ayla dijo...

Muchas gracias!

Besos

Contraindicado dijo...

Enhorabuena!!! Que tranquilidad deja el alcanzar metas, y que bueno es pensar que no hay montañas suficientemente grandes.... Besotes!!!